Calendario 2023 Besos de Árbol

El calendario_2023 de Besos de Árbol se titula "El jardín de Frida". Ahora está en proceso de pruebas de impresión y revisión de imágenes y textos, pero ya puedes reservarlo para comprarlo en los próximos meses.

Este año aparecen algunos de los muchos árboles y plantas del mismísimo jardín de la Casa Azul de Coyoacán, o lo que os lo mismo, el Museo Frida Kahlo. El que Frida y Diego quisieron crear juntos, y el que siguen manteniendo y cuidando las encargadas del Museo a día de hoy. Fue una idea que se me ocurrió una noche de abril del año pasado mirando el mar y las estrellas, y que logré hacer realidad conforme más avanzaban esta primavera y verano, conociendo al detalle más historias de Frida y transformando mi propio dolor, y demás vivencias, en pinceladas de intensos colores, convirtiéndolas en cuadro y además en calendario.

Pinté “El jardín de Frida” (100x120cm) entre 2021 y 2022, inspirada en el jardín de la Casa Azul de Frida Kahlo (Coyoacán-CDMX), afinando mi mirada cada vez más observadora, eligiendo fotos publicadas en las redes sociales del Museo de Frida y buscando entre las que tengo de mis respectivas visitas en 2007 y en 2016. En la portada y las 12 páginas del calendario podrás disfrutar de palmeras, jacarandas, bugambilias, diferentes cactus, algunas flores, hojas de diversas plantas, agua, piedra volcánica, pluma de paloma y lazos familiares, entre muchos detalles más. 

También puedes entrar a la web del museo y darte un paseo virtual www.museofridakahlo.org.mx 

El calendario sigue manteniendo tanto el formato (tamaño A4) como el tipo de papel (de bosques sostenibles). Para esta edición modifiqué su precio a 14€. Además lo acompañará una postal de la obra completa y un marcapáginas a todo color y dolor de columna y corazón.

Una vez más, tiene nuevos ecofestivos oficiales e inventados, porque siempre surgen motivos para sumar y también para eliminar los que ya no aportan.

Si decides tener alguno, escríbeme para poder reservar los que quieras. Hago envíos a cualquier parte del mundo que me indiques, y te explico cómo prodecer según el tipo de entrega/envío.

Gracias a lxs mecenas de siempre por quererlo un año más y a las nuevas clientas que ya comenzaron a pedir el suyo. Me impresiona asimilar que ya voy por el 7º calendario llenos de árboles, plantas, flores, semillas, días, sensaciones, historias y gente maravillosa que sabe apreciarlo y no deja de sorprenderse cuando lo ve.

Gracias especiales a Horacio Medina, biólogo y gran amigo, por el acompañamiemto transoceánico y la precisa aportación de los nombres científicos de todos los seres vegetales que quise retratar a mi manera. Y siempre a A.Metztli por la gran ayuda con el diseño... y todolodemás.

Fotos: Marthazul

 

* Si quieres participar en el proyecto envía tus fotos besando/abrazando árboles a besosdearbol@gmail.com

* Si quieres colaborar y convertirte en mecenas puedes hacer un donativo, o comprar algún producto arbóreo pintado por Marthazul, o ser parte de Teaming por solo 1€ al mes el tiempo que tú quieras/puedas.

GRACIAS por ayudarme a seguir cuidando este bosque virtual de árboles besados por el mundo.

 

 

Trenes, gingkos y girasoles

El último árbol besado de aquella peculiar ruta fue a un gingko afuera de la estación del tren, ya besado al poco tiempo de comenzar este proyecto sin conocer siquiera su nombre (entrada editada) y esa vez arropado por unos hermosos girasoles relucientes y rechinantes, como la música que comenzaba a escuchar ese verano.

Besé al gingko biloba soleado la tarde del 17 de julio de 2017 en un lateral de la calle Eduardo Pondal de Pontevedra.

Fotos: A.Metztli y Marthazul.

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Volver a volver

Desde aquel día, llegar caminando a donde está el carballo de Santa Margarita, se convirtió en parada necesaria, más que para las piernas, para el alma. Observarlo, según los colores estacionales, y quedarse siempre maravilladxs, es casi obligatorio.

Llevar tantos años con retraso evidente de publicaciones, tiene sus cosas buenas. Como en este caso, dedicar este besodeárbol a la canción Volver a volver de Gabo Ferro y estos versos que nos acompañaron en tantas pinceladas:

 "... Porque... yo me iré como el humo al aire
Que no podrá volver
Me haré un tornado dulce, un perfume, una piel
Seré mi propia madre y así voy a aprender
Que irse es volver a volver..."

Por eso, desde entonces decidí-mos que lo mejor de tener que ir al hospital sea el regreso disfrutando lo verdaderamente importante: la naturaleza que sí me regula las glucemias, siempre alteradas por efectos humanoides. Volví a abrazar y besar al carballo de Santa Margarita 7 años después, con absoluto cuidado y respeto, aquel lunes 17 de julio de 2017 en Mourente (Pontevedra). Gracias.

 

Fotos: A.Metztli y Marthazul.

 

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Carballeira entre Pomba e Costado

Seguimos bajando la carretera, y nuestras miradas tendían a fijarse en los tonos verdosos. Decidimos cruzar hacia una zona de carballos, al detenernos, alcanzamos a leer el nombre del lugar por el que siempre pasábamos de largo, y ser conscientes de que esos árboles, quizá centenarios, siguen allí, junto al pilón en ruinas, pasemos quienes pasemos, sin querer mirar, sin querer ver, sin querer observar el otro lado, la vida natural que tanto nos da y tan poco agradecemos. Desde entonces, es positivamente diferente pasar por allí, a pesar de lo que me hayan dicho las de la bata blanca.

Gracias. 

 

 

Fue el 17 de julio de 2017 que me acerqué y detuve a besar este roble en la carballeira que está entre la Rúa Pomba y la Rúa do Costado en Mourente (Pontevedra). 

 

Fotos: A.Metztli y Marthazul.

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Beso cambiante

De repente suceden cosas en la vida que te hacen cambiar lo que considerabas "de siempre". Se te ocurre hacer algo de otra manera, más independiente y natural, aunque sea motivada por algo poco apetecible. Así fue, aquella vez que fuimos por primera vez a buscar recambios para mi bomba de insulina a nuestra bola, y sobre todo, descubrimos lo diferente, y sano, que es al menos para mí, ir en transporte público y regresar caminando observando nubes, árboles, florecillas y hojas caídas... Detenerme a cruzar por donde tantos años había que pasar de largo, y decidir por mí misma besar a un árbol que sigue estando en un no-lugar importante.

Besé este pino-rotonda el 17 de julio de 2017 en Avenida Montecelo (Mourente-Pontevedra).

 

Fotos: A.Metztli y Marthazul.

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Beso de noche aterciopelada, reluciente y rechinante

Fue un verano determinante y muy musical, y en cuanto supimos que Aterciopelados, la banda colombiana que tanto Augusto como yo, seguíamos y escuchábamos desde antes de conocernos, formaban parte del cartel de Portamércia 2017, compramos las entradas ajenos al mundo festivalero. El calor y el aire definían aquella tarde en la que pillamos el bus oficial esperando bajo árboles del parque Miguel Hernández. La emoción fue tan constante como natural. Llegamos y de repente ya vimos a Andrea y a Héctor con los demás de su banda, en la prueba de sonido. Augusto se puso a dibujar ese instante, y luego a mí se me ocurrió besar uno de los carballos que cobijaban su escenario. Les llamó la atención mi eco-gesto, fuimos pocos quienes disfrutamos el concierto,  después les pudimos saludar durante un buen rato y puedo decir que desde entonces estamos conectados con buena onda... porque Somos Gente Árbol.

 

Aquella noche fue demasiado larga, porque todolodemás no nos interesaba tanto, pero como fue nuestra decisión ir hasta el final de esa jornada, pues buscamos la manera de vivir el festival de otra manera a la típica que se ve, se oye y se huele. Una de esas tareas alternativas fue fotografiar y besar árboles del entorno natural en el que durante unos años de desarrolló el festival. 

 

 

Era un mundo de música, intento de gastronomía top, y árboles, muchos árboles, tanto de la propia carballeira como del jardín. Aunque apenas se veía en la madrugada, elegí un magnolio para besar aquella noche del 13 al 14 de julio de 2017 en  el Jardín Botánico de Caldas de Reis (Pontevedra).

 

Siempre recordamos que cuando llegamos a casa, Cartulino y Libreta habían celebrado su 1º festival conejil en nuestra ausencia.

 

 

Fotos: Marthazul y A.Metztli

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Con trenzas y rebozo

 

 

Besé al gran ¿laurel? solitario de O Ramal (Vilagarcía) la tarde gris del martes 27 de junio de 2017.

 

                

Desde hace años percibo más y mejor el cambio climático con los contrastados cambios del clima que no recuerdo ocurriesen cuando era pequeña. Aquella fue una tarde nublada y fresca de comienzos verano, similar en tonalidades y ánimos, a la de aquella tarde de cuándo decidí espontáneamente comenzar esta extraña andadura de besar árboles por el mundo. Por suerte, 5 veranos después, ese árbolote sigue creciendo en pie, solo, pero en pie, y a pesar de mantener basura que algunos humanos pretenden esconder entre sus troncos que confunden con papeleras. 

 

Sí, para saber dónde voy a besar cada árbol, debo de observar bien la zona, porque casi siempre está habitada por un universo in-visible de fauna y flora.

 

Fotos: Marthazul y A.Metztli

 

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Beso manso y colorido

 

 

Era el día oficial de Besosdeárbol, y fui a celebrarlo con uno de los árboles retratados para mis mecenas de 2016. Besé aquel pino manso la tarde del 13 de junio de 2017 en el parque da Concha (Vilagarcía de Arousa) regresando de un paseo a la orilla del mar. Llevaba el 1º calendario mostrando el mes de junio que iba acompañado por la ilustración de ese pino. Ahora, que lo publico 5 años después de haberlo besado, me emociona ver allá al fondo, al plátano de sombra solitario, que algún desalmadx intentaría matar un par de veranos después, pero rebrotó, como lo hacemos las mal llamadas malas hierbas.

 

    

 Chaqueta de @delasmanosdeNieves y pañuelo de @verdesmanzanas 

 

 Fotos: Marthazul y A.Metztli

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Beso de Xumuc

Quizá fue el último o penúltimo viaje (hasta ahora) de Marisol Cosimano a su tierra. Aquella vez, entre sus tareas familiares, se pudo acercar a una árida zona desde donde me regaló esta imagen tan impactante, besando un enorme cardón órgano. Fue el 13 de agosto de 2017 en Humahuaca (Argentina). Gracias por esto y todolodemás. 

 Foto: ¿Javier Doz?

 

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Abrazos de la Pochate

Conecté con Jennifer, y/o ella con Besosdearbol, gracias a la colaboración de Luis y su beso de tumbador, siendo Dulzaides y La Pochate compañeros de la Gira Estaré, mientras recorrían el mundo sobre escenarios y detrás de cámaras.

 

Jennifer Pochat abrazó estos árboles en Nanacamilpa (Tlaxcala-México) el 4 de julio de 2017 y en Jerez de la Frontera (Cádiz) el 17 de agosto  de 2017. Gracias por tu doble colaboración, haciendo que se unan las luciérnagas y el flamenco en un mismo espacio virtual de fotógrafa fotografiada.

 Fotos: ¿compañerx de gira?

 

  

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